Hipo.condriaca. La viDa, una baTalla.

Es dificil.
Algunos lo etiquetarían como imposiblemente probable.
Bailar gritos de lluvia.
Cerrando a las puertas del suspiro, esos labios plagados de besos. De promesas en secreto.

Ahora que las gotas saben esquivarnos.
Ahora que encontramos un lugar seco, entre tanta culpabilidad.
Sentarse sería la mejor elección.
...
Es dificil.
Algunos lo tacharían de probablemente imposible.
Escribir a oscuras, durante media hora y definir el mañana con palabras al azar escojidas entre tanto rallajo sin sentido.
Ahora que te tengo cerca de mí, dejarte escapar sería el sin sentido.
Sin sentido, durante media hora y definir el mañana.


Publicar mis memorias.
Y dejarte hablar.
Palpas a ciegas, algun lugar mejor, en el que no estar.
Irme de tu lado. Y dejarte querer a distancia, a lo largo de este pasillo lleno de chinchetas dadas la vuelta.
Descansar tumbado encima tuyo. Dormirme encima tuyo. Respirar encima tuyo.
Suspirar encima tuyo. Desnudarme encima tuyo. Y descubrirnos tiernos, calientes, sinceros.
Entre tanta mentira, lo mejor es este momento.




Probablemente imposible, que no duremos. Que no despertemos a las cinco de la mañana una noche de verano, con una fina sabana de alcahueta que cubra mis secretos a voces.
Y darnos cuenta. Y darme cuenta y contartelo al oido.
Que ya somos viejos.
Que ya nos dimos cuenta.
Que nuestro momento en el tintero se quedó.
Y que este con su tinta seca se aburrió... de palabras sin sentido, de frases sin tinta, de firmas sin acento...
Ahora que probablemente estemos perdidos.
Tomemos un segundo, en la cera de algun suspiro.
Contemos al oido, hasta diez.
Hasta que sepamos irnos sin hacer ruido.
Sin que el otro llege a despejar su mente.
Sin que los pasos asusten nuestras conciencias.
...





Algunos lo han catalogado como imposiblemente probable que sea probable que pase.
Algunos son muchos.
El resto somos nosotros.
Y aquí estamos.
Tiremos para adelante.
Que tenemos derecho a desafiar alguans veces a la estadistica y otras... a rezarle. Que sean de verdad sus prediciones, y que no esté tirando borda por la ventana, ni la ventana por.... mi boca.
Mi loca.
Mi poca.
Mi...















Angel Bueno.

Tener pesadillas.
Soñar con el dolor de no querer levantarte.
Y lograr cinco minutos más.
Algunas veces vale la pena llegar tarde.
Si supiste aprovechar, esos abrazos calientes e inutiles... sobre tu almohada.
Quién mejor que ella, se merece tu error.
Ahora que llegas tarde. Dediquemos un minuto para pasar el resto de la vida juntos.