domingo, 21 de marzo de 2010

TraqueosTomía, sin saliDa.


en este espacio, me busco puro.
Me busco pasado.
Me busco con ganas pero sin certeza.
De que si al que busco existe o ya ha sido engullido.
Por esta habitación falsa, que cae en el desánimo de las horas muertas que proporciono a mis ratos libres.

Hay certezas reales.
No soy blando.
No soy delicado.
La cruel y dura realidad, proporcionan a mi verdad ganas para golpear siempre y actualmente a la mayoría de gente que me rodea.
Es necesario?
Es real?
Es real la verdad con la que golpeo?
De momento no lo sé.
De momento ni sé si hago bien, ni siquiera sé si hago.
O dejo de hacer, de ser, lo que era.
Si este Angel que esta es el que existió antes de cumplir los 11 años. O es un transfondo que sumerge como la peor mierda oculta tras seda en el fondo de este pozo fermentado.

Ahora solo sé que tengo ganas de acabar con algo, conmigo. Y empezar.
A vivir.
A no querer arrepentirme.
O hacerlo lo justo, para poder enseñar con mis fallos.
Una vida entera llena de baches y hoyos repletos de actos rectos y fiables... que se proyectan en el salon/comedor de esta mansión, a la que dejaré de herencia.
A quien.
A cual.

Al futuro.
A nadie más.
Y si no llega.
Y si va a llegar.
Y no quiere.
Y no me va a dar.
Que se quede donde esta.
Que mi lucha seguirá.
Y no pretendo quitar.
Ni robar.
Ni perjudicar.
Cojer mi propiedad.
Y crear algo más que un hogar.
Un proyecto de mi lucha.
Una buena obra hecha realidad.
...
Realidad.
Crear realidad.
Mi realidad.


Y de nadie más.









...


Y con este nudo, que frena el aliento por la traquea de este castigado pulmon.
Mudo mi respiración hacia conductos selectivos, más permeables que los antiguos.
Mi traje de estupido y amable se mojó este pasado invierno.
La estación se ha llevado consigo, el tren perdido al que pense montarme, cuando era crio.


Solo quiero ponerme decidido, y de una vez.
Las ganas a la espalda, y que esta esté limpia y sin mierda. Que no manche las ganas y que consiga mi meta.
Que esta me dara el camino para crearme.
Y ver.
Y notar.
Y saber.
Si buscarme o dejarme de buscar.
Si esta habitación ha sido mi hogar.
O mi hogar fue la muda que deje ayer, tras el ultimo tren, irse con la estación.
Sea quien sea.
Es la presente realidad.
Y hay que gobernarla, saberla llevar.
Te duele?
Te molesta?




...



...


Respira?
Pues que espere.


Angel Bueno.

sábado, 20 de marzo de 2010

in.esperaDo.


Nadie se cree que su vida va a ser solo medio buena, todos creemos que vamos a ser geniales, y desde el día que decidimos ser enfermeros estamos llenos de expectativas. Expectativas de los caminos que abriremos, de las vidas que salvaremos, los cambios que haremos. Grandes expectativas de quienes seremos, a donde iremos... y luego, llegamos hasta allí.


Todos creemos que vamos a ser geniales, y nos sentimos un poco atacados cuando no cumplimos nuestras espectativas. Pero a veces, nuestras espectativas se quedan cortas. A veces lo esperado se queda vacío al lado de lo que no esperabamos. Nos preguntamos porque nos agarramos a nuestras expectativas, porque lo esperado es lo que nos mantiene firmes, levantados, fuertes. Lo esperado es solo el principio. Lo inesperado es lo que nos cambia la vida.





...

una meTa, sal vivo de esTa.

Crecer, es lo primero que aprendemos en esta vida. Desarrollar musculos y huesos. Acciones hechas por nosotros se vuelven el siguiente plato. Y despues, siempre llegan las hormonas y las acciones dadas por estas. Siempre complejas, comprometidas, circumflejas, que rodean la locura y que nos lanzan hacia donde jamás sabríamos cómo acatar sin ellas.

Despues sabemos reaccionar, a diferente nivel. Unos sobre el nivel del mar, otros sin bajar de las nubes.
Y acabamos siempre igual.
Rápidos.
Sin pensar.
Subiendo como no, la montaña que nosotros tuvimos que crear, apretados por la sociedad.
Descalzos y hiriendo nuestra sensibilidad.
Nos da igual perder el sabor, el tacto, el olor, el oido...
Queremos contemplar las vistas desde arriba.
Y bajar rodando ya no nos importa, hemos robado este cuadro a la vida y ese es nuestro destino.


Todo esto... compuesto de acciones idiotas, hormonados sentimientos, que nos llevan a caminos llenos de siempre dificultades extras que en la vida podríamos haber previsto.
Pero nos da igual.
Robar.
Robarnos, en la cima.
Un beso, una caricia.
Juntos.
Y cojer el gran cuadro de aquellas vistas.
Y dejarnos llevar.
Ahora has/emos ganado. Y todo nos da igual. Mentira!, sigen habiendo montañas. Dificultades hormonadas que nos crean castigos y espectativas de cuadros iguales, peores o mejores, pero otros cuadros, otras vistas.
Que nos comprometen una vez, nuestra oida, nuestro tacto, olfato y al final la vista... que ciegan el nuevo camino y la nueva huida.

Atreverse es siempre la chispa que nos empuja a bajar rodando por iniciativa propia.










Decidir el momento, parece que es la unica decision propia.












Angel Bueno.








Rápido.
Y sobretodo, bien. Que esté bien!.
Si no, no me sirves.
Rápido.
Que no falte nada.
Se inteligente, y sé listo.
Pero, rápido!.
No descanses.
No comas.
No pares.
Siente y piensa.
Es la unica salida.
Aquí en urgencias, la gente no descansa, y tu puesto está en juego.
...
Mientras tanto, entre tanto proposito.
Mi única meta eres tú.
¿Estás bien?.
Espera, que me siento y me cuentas, porqué estás aquí. Frente a un extraño.
Frente a uno más.
Que a diferencia de otros.
Este quiere que estes bien por tí, no por mí.




Hola!, cómo te llamas?.
Encantado!, me llamo Angel... y digame... cómo se encuentra?

domingo, 7 de marzo de 2010

gasTo carDiaco, desCompensa.a.Do.s


Huir, huyamos, los dos o solo, o solo, un momento.
Cómo eramos, o ser, o seamos, los dos, solo, o solo un momento.
Darte aliento, o que me lo des, o darnos uno. A los dos, tan solo, o no, un momento.

Y concluir, este tiempo, un instante. Un segundo.
Sin nosotros.
Y yo, ya, no sé, qué hacer.

Vés.
O vente.
O no veas.
Que ya todo.
O nada.
Es igual.
O no...
Lo que sé.
Es que ver.
Es venir.
Y abrazar la verdad.



...
Porque saber verdad, hay veces, que te hace darte cuenta... que todo lo anterior, fue mentira.
Y yo...
Solo un momento.
Solo, o no, un instante. O dos.
Supe.
Olvidarme, o te, o yo que sé, qué más da. Dos o tres.
Igual.
Sigo pensando, sentado.
Que será lo mismo, el resultado.
De los dos, de uno mas tú, o dos menos yo.
Que... este beso que sincroniza mi corazón con la muerte, el separarte de mi. Mata mi presente...
Y... yo no valgo para los funerales de gente desconocida.


Por eso, quererte.
Vale más, que dos menos yo o tú.


Perdiendo a cada instante, el interés que imprimes en tu boca...
Con la rapidez en cada instante, o dos, o tres, ya da igual, o no.
De contestar.
Y... desesperarte.
Porque... ya, la suma.
Resta importancia.
Al igual.
...


El resultado de nuestro beso.
El único afortunado. O no. O qué?
O no?
de los dos...













Angel Bueno.
La suma de los dos, siempre daba uno. Siempre me daba uno.
Y a ti?
...


Aprendí tarde a sumar mal. Y ahora... ya las matematicas se fueron del cuaderno.
Y mi diario se ha quedado sin hojas... tengo garabatos en cada gesto y abrazo... y manchas de agua salada en cada lucha y esfuerzo.
Esta suma me mata y quiero saber si...
Te daba dos a ti.










lunes, 1 de marzo de 2010

Hemianopsia con los ojos cerraDos.


Tengo, varios jarrones en mi memoria.
Diversos liquidos rellenando una superficie basta, ya que dentro, ni el sabor a la primera gota se aguanta... todo huye, todo se escapa.

Y yo observo. Cómo cada palabra que escribo, sobra en esta cabeza loca de agua, saturada por disolver todo antes que nada.
No aguanto, no espero, no sé callar, ni me dirigo a nada. Pierdo el norte cuando miro la brujula.
Y olvido los sueños que quiero. Cuando me pregunto si duermo... me despierto.
Y caigo rendido cuando mi enemigo me desafía, junto a la espada una margarita... que me acompaña por si me rindo y prefiero decidir mi vida a base de deshojar flores antiguas.

No es justo, que tanto jarron se llene con cada tormenta. Que no se sepa llevar toda esta agua bidestilada a otro lado más seguro, menos húmedo.
Ahora que mi cerebro parece una piscina llena de sentidos con un poco de morfina... duermo y mis sueños hacen cola en la memoria.
Mi memoria te espera sentada en la silla menos comoda de esta habitación...
En la que cierro todo mi interior.
En la que no debo dar comida... hasta que se conteste mi petición.

Que hacemos conmigo?
El frente me pide un camino y yo solo tengo pasos largos que dar.
Correr hasta el horizonte y saltar, para que se sepa que supe llegar...
Aunque a esa distancia... mi nombre se quede solo en las huellas que sepa dejar.


Entre tanto arenal...
No me fio de la caducidad de los logros.
Ahora vienen, ahora se van.

y... bueno... alguno sabrá que hacer.
Y en ese instante. Decidiré que hacer.
Porque ese soy yo.







Un perdido entre tanta humedad y memoria seca.
sabedor y perdedor.
Que no se trata de usted.
Que despide a su honor.

Que acaba de escribir... la mejor mentira para su interior.
Una tormenta se acerca y este es mi ultimo recurso...
Escribir debajo de mi cabeza...
Por si decido salir.






Angel Bueno.

Paranoias, que escribiendolas... dejan lugar a otra cosa menos de mí, más del monton.