lunes, 1 de abril de 2013

Cerrar una hemorragia con palabras y dejar de coser.


Todo lo que se necesita, para respirar bajo la lluvia.
Es creerte capaz de mojarte sin pensar...
Qué haré para secarme cuando esto acabe.


Tirar canciones que no te ericen la piel.

Buscarte arrugas en tu rostro nostálgico de sonrisas. 
Ignorar paisajes perfectos que solo buscan llamar la atención. 



Golpear parachoques que no saben lo que es un buen siniestro. 

Suspirar al oído a la chica que vende su beso por un par de euros. 
Estrechar la mano de aquel que no le interesa nada de lo que tengas. 
Y que solo ansíe todo lo que seas. 



No se trata de intentar algo que está por probar.

Que surja de un deseo todo sentimiento y motivación.
Maniobrar un giro y que este de ganas de volverlo a intentar. 
No hablo de subir una cuesta para ver la cima y todo a mi alrededor.


Mis intentos saben a sudor.

Mis montañas caminan detrás mío.
A los esfuerzos les doy valor.
Las vistas las pongo yo. 



Jamás olvidé de donde vengo.

Me hiere pertenecer a algo que no camina conmigo.
Mis gestos cobran sentido después de que acaben contigo.
No volveré a escribir jamás, la misma palabra con el mismo objetivo.












Angel Bueno Luna.
El precio de una buena siesta, lo pago con noches como esta.
Ni tienen sentido, ni destino.
Forman parte de mi olvido.
Construyen y destruyen sentimientos.
Dejo huella para no perderme entre tanto barullo aquí metido. 

No hay comentarios: